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El sábado jugamos nuestro primer partido de liga en casa. Nos enfrentamos a un muy buen equipo, el Paiosaco, que hizo trabajar mucho a nuestros niños. El partido empezó como yo pensaba, con mucha igualdad y siendo un partido muy duro para los jugadores, que tuvieron que entregarse al cien por cien para logran ponerse por delante en el marcador. El trabajo va dando sus frutos y durante todo el tiempo de juego mantuvimos bastante bien las líneas y trabajamos mucho en defensa desde arriba. Al Paiosaco le costaba mucho pasar a nuestros jugadores y llegar a portería ya que todos defendían con uñas y dientes. Esto empieza a parecer un equipo y con trabajo seremos un muy buen grupo. Todos trabajan tanto en defensa como en ataque y lo mejor de todo disfrutan de lo que hacen. Los apoyos en defensa y ataque fueron constantes, nadie estaba solo en ningún momento y el compromiso se contagia...., el buen trabajo de los niños fue reconocido por parte de todos y el apoyo desde las gradas fue permanente.
Fito
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