¡Compartelo en las redes sociales!
El sábado nos desplazamos al campo de futbol de O roxo para enfrentarnos al Cerceda. El horario del partido, la una de la tarde, no ayudó a que los niños jugaran al fútbol al ser un día muy caluroso. Los jugadores sufrieron mucho, tanto por el calor como por el juego del equipo rival, ya que al estar formado por niños casi todos de segundo año y muy fuertes físicamente, no dejaron a los nuestros realizar su juego, hasta el punto que algunos niños parecían desmoralizados y no corrían ni se esforzaban, al igual que la lucha y la entrega se contagia, la apatía y la falta de voluntad también y por momentos no parecían los jugadores a los que estamos acostumbrados. Tenemos que seguir trabajando para que entiendan que ganando o perdiendo hay que entregarse, ya que si uno no trabaja en el campo porque lo van a hacer los demás, el fútbol es entrega y sacrificio al igual que diversión. Trabajaremos en esto y en la colocación para seguir mejorando como equipo.
También decir lo orgulloso que estoy de mis niños, ya que ganen o pierdan salen siempre con una sonrisa.
Fito
Si te ha gustado, ¡comparte!