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Emocionante partido el vivido en la fría y lluviosa mañana del sábado donde nos tocó recibir al Rayo Sadense. En el vestuario antes del inicio del partido, lo más complicado fue contener la euforia de los chavales que después de lo sucedido la pasada jornada, estaban muy confiados de que podían ganar de nuevo.
Ya en el partido, saltamos al terreno de juego con el mismo esquema que en la pasada jornada y nuestros jugadores pronto se hicieron con el dominio y la cosa pintaba bien.
En un zapatazo desde fuera de área, Adri anota el primero para los nuestros con un balón ajustadisimo a la cepa del palo.
Ya en la segunda mitad en un saque de esquina Alex anota el 2-0 con un impecable remate de cabeza a centro de Adri y a los pocos minutos Pablo, perfora de nuevo la portería rival con una magnífica jugada donde regatea en carrera al portero fuera del área y define con un remate cruzado para llevar el 3-0 al marcador a falta de 15 minutos para el final. todo parecía indicar que íbamos encaminados a una nueva victoria y lo que es más importante, jugando muy bien y no concediendo al rival ninguna ocasión clara de gol. Pero esto del fútbol ya se sabe como es. A falta de diez minutos para el final, el Rayo se mete en el partido anotando su primer gol de penalti y a los dos minutos acorta distancias con un tiro lejano para llevar los nervios a las gradas y sobretodo al terreno de juego. Con ese 3-2 en el marcador nos olvidamos de jugar y llegaron nuestros peores minutos donde nadie quería el balón y estábamos más pendientes de que no nos marcaran el empate que de hacer nuestro juego, y cuando estás más pendiente de que no te marquen que de jugar que suele pasar......pues que te marcan y así fue.
En el minuto 48 llegó el empate, echando por tierra el trabajo realizado por nuestros jugadores. Pero ahí nuestros chavales se olvidaron del resultado y volvieron a jugar con valentía lo que les sirvió para provocar una falta al borde del área. A la ejecución Alex y del otro lado el portero rival que rechazó el balón, pero Martín que lee el fútbol muy bien, aguanta el fuera de juego y se adelanta a su marca para rematar y darnos la victoria en el último minuto.
Claro está que nos alegramos por las victorias, cosa que nos motiva a todos y sobre todo a los chavales, aunque lo más importante sigue siendo lo mismo que cuando se perdía, la progresión de los niños. Lo que hace que las victorias tengan más valor aún, es que todos los jugadores aportan y ellos mismos ven que si trabajan y se esfuerzan las cosas salen mejor. No hay secretos ni pócimas mágicas, en el deporte al igual que en el resto de cosas, gran parte del éxito depende del esfuerzo y la actitud con que te enfrentes a ellas, esa es la lección que más repetimos a estos chavales y parece que el mensaje va calando, pues es de resaltar la implicación y compañerismo de todo el grupo.
El jugador que formará parte del once ideal esta jornada es Alex.
Seguro que está cansado de nosotros por que le exigimos muchísimo y es el nombre que más repetimos durante los partidos.....
Comportamiento ejemplar, implicación y calidad al servicio del equipo. A su ritmo, pero siempre con sentido. El gol que marcó fue de libro, anticipación, saltó y giro de cabeza....
FORZA PASTORIZA!!!!
Javier Vecino.
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